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El Campamento de Pereiro creó un itinerario de 14 km con el que se interactúa desde el móvil

Los integrantes del campo de voluntariado “Turismo Sostible”, que arrancó el 27 de julio en Pereiro y terminará pasado mañana, han creado una ruta de 14 kilómetros a través de los recursos naturales del Concello que se puede seguir desde el teléfono móvil. En esta edición, los participantes son una docena de jóvenes de 18 a 30 años llegados de toda España, desde lugares como Vigo, A Coruña, Sevilla y Guadalajara. También llevan varios años trabajando en la recuperación de la barrera de Loñoá, de donde se extraía el barro para la elaboración de cerámica, con el objetivo de preparar una gran fiesta etnográfica, pero este proyecto se encuentra parado por el momento debido a la pandemia.

Paulo Vázquez, miembro de la agrupación ecologista Sustinea, que colabora en la organización del campamento, resalta que “se demonizou á mocidade, cando hai xente boa que adica o seu tempo de ocio a axudar. Neste caso, contribuíndo a eliminar unha especie invasora como é a robinia pseudoacacia, por exemplo”, recalca.

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Borja Pérez, director del campamento, que ubicó su sede en el albergue de Ordelles, define a los participantes como “jóvenes que aprovechan su tiempo de ocio para promover lo que es de todos. Es un lujo, y algo muy fácil, trabajar con quien tiene esos valores”. Tanto el delegado territorial de la Xunta en Ourense, Gabriel Alén, como el alcalde de Pereiro, Luis Menor, que visitaron el campo en su inauguración, valoran la iniciativa por su puesta en valor de los recursos naturales y etnográficos. Alén destaca que “el voluntariado tiene un componente de solidaridad muy importante”. Por lo tanto, defiende que el éxito de esta iniciativa “muestra la solidaridad de los jóvenes, que estaban en un momento complicado por los contagios de covid, y aquí se ve reflejado que muchos de ellos dedican su tiempo a la ciudadanía”.

“En Ordelles les encanta escuchar bailes, canciones e historias”

El alcalde de Pereiro, Luis Menor, explica que “el campo de voluntariado tiene actividades que redundan en el concello, como la creación de la ruta de senderismo junto a formaciones geológicas y en el entorno de San Pedro de Rocas y su monasterio”. El regidor también valora el trabajo medioambiental, “con la eliminación parcial (esta actividad se lleva a cabo hoy) en la ruta dos Muíños de una especie invasora similar a la acacia que llegó como ornamental y ya se extiende por A Derrasa”.

Los 12 días de actividad del campamento cuentan con el albergue de Ordelles como centro neurálgico, y el regidor explica que este es “un gran elemento dinamizador para el Concello de Pereiro. La emigración está muy presente en Ordelles, de ahí que sean extraordinariamente bien recibidos los visitantes de todas partes de España y Galicia. Aquí se recibe de muy de buen grado las canciones, bailes e historias de todas partes”.

Menor celebra que el albergue ya haya recuperado parte de su actividad a pesar de la pandemia, y destaca la fuerte interacción con los vecinos de Ordelles, “que regresaron de la emigración desde ciudades como Bilbao o Barcelona. Hay segundas y terceras generaciones que vuelven a Pereiro en verano, y el espíritu es siempre abierto y acogedor. Estas actividades son muy queridas en el pueblo. En todos los campamentos que hacemos aquí, la interacción vecinal es muy importante, con jornadas de puertas abiertas”, valora.

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